Compromiso, progreso, futuro: los temas centrales del Congreso Nacional de Profesiones de Unión Profesional fueron la síntesis perfecta del papel de las profesiones en nuestra sociedad y en nuestra economía. Se trata de temas importantes, que nos llevan a reflexionar sobre la evolución del mercado de los servicios profesionales y, al mismo tiempo, sobre las opciones estratégicas de la Unión Europea para apoyar ese proceso de integración que, 70 años después del Tratado de Roma, aún no se ha perfeccionado.
El objetivo de las instituciones comunitarias de diseñar una sociedad plural, dinámica e integradora se ha desplegado a lo largo de los años a través de políticas de desarrollo de geometría variable que han privilegiado numerosos sectores productivos e industriales, descuidando el componente laboral intelectual. La ausencia de una visión estratégica clara de las profesiones liberales en el proceso de crecimiento del mercado común ha conducido así en los últimos años a un empobrecimiento generalizado del tejido profesional europeo, que hoy se enfrenta ante los desafíos del futuro con herramientas decisivas.
Las profesiones en Europa se apoyan en dos pilares fundamentales: la libertad de establecimiento y la libre prestación de servicio.
Las profesiones en Europa se apoyan en dos pilares fundamentales: la libertad de establecimiento y la libre prestación de servicios. La necesidad de armonizar las normas de formación profesional y el reconocimiento de las cualificaciones profesionales ha ido de la mano de la necesidad de liberalizar el mercado de servicios profesionales, eliminando aquellas barreras económicas que se oponen a una sociedad europea más integrada. Sin embargo, aquí empieza y termina el proyecto de desarrollo diseñado por las instituciones europeas sobre el sector profesional.
Más allá de los escasos resultados obtenidos por las políticas previstas por las instituciones comunitarias (que, por otra parte, no han contado -si no esporádicamente- con la participación de las asociaciones representativas del sector), debemos tomar conciencia del peso político y social de las profesiones en Europa, para definir la contribución que la profesión liberal puede aportar a la sociedad europea y a la economía europea y por tanto, trazar una hoja de ruta innovadora que, partiendo de la armonización de la formación profesional, el acceso de los jóvenes al mercado laboral, la digitalización y las agregaciones entre profesionales, hasta la protección social del trabajo autónomo, sea capaz de recordar a la Unión Europea sus responsabilidades en el proceso de crecimiento de nuestro sector.
La Europa del mañana se basará cada vez más en las competencias laborales profesionales, también a la luz del aumento de la demanda de servicios profesionales en nuevos ámbitos, como los relacionados con la transición ecológica, los servicios personales, el cuidado de la familia y el ocio, las estrategias empresariales y los nuevos medios de comunicación.
Empecemos analizando los datos sobre las profesiones en Europa. En un contexto de depresión general del trabajo autónomo e independiente, las profesiones liberales se mueven a contracorriente. Entre 2009 y 2019, el número de autónomos aumentó de 4,4 millones a 5,5 millones. La tasa media de crecimiento fue del 247% y la dinámica positiva afecta a todos los países europeos, aunque con diferentes intensidades. Esta trayectoria de crecimiento se vio impulsada por la terciarización de la economía y el aumento de los niveles de educación y cualificación de la mano de obra. En este contexto, por tanto, las profesiones liberales representan una respuesta estructural a la crisis generalizada de la economía europea. También hay que destacar que la expansión del trabajo profesional sólo se ha visto frenada en parte por la pandemia y que, a escala europea, el sector se ha mantenido sustancialmente resistente.
A pesar de la actual situación económica, lastrada por la crisis energética y las incertidumbres relacionadas con el conflicto en Ucrania, la Europa del mañana se basará cada vez más en las competencias laborales profesionales, también a la luz del aumento de la demanda de servicios profesionales en nuevos ámbitos, como los relacionados con la transición ecológica, los servicios personales, el cuidado de la familia y el ocio, las estrategias empresariales y los nuevos medios de comunicación.
Compromiso, progreso y futuro se convierten entonces en los nuevos paradigmas para afirmar la responsabilidad ética y social de los profesionales ante la ciudadanía, las empresas y las instituciones; pero también para apoyar las profundas transformaciones de la sociedad y la economía, en una visión renovada, sostenible e integradora.
Dr. Gaetano Stella, presidente del Consejo Europeo de las Profesiones Liberales (CEPLIS).