El 13 de marzo el Parlamento Europeo aprobaba la Propuesta de Reglamento en materia de Inteligencia Artificial, una norma pionera a nivel mundial que sitúa a Europa a la vanguardia en la regulación de estos sistemas y con la que se busca fomentar el desarrollo de la Inteligencia Artificial (IA) preservando los derechos fundamentales y la seguridad ciudadana. Para ello, clasifica los sistemas según su riesgo y prohíbe el uso de aquellos que considera que suponen un riesgo inaceptable para la ciudadanía al ser contrarios a los valores de la Unión Europea. Estos englobarían «todas aquellas prácticas que tienen un gran potencial para manipular a las personas mediante técnicas subliminales que trasciendan su consciencia o que aprovechan las vulnerabilidades de grupos vulnerables concretos», recoge el Reglamento.
A través de este test, profundizamos en los objetivos del Reglamento, su aplicación, así como los elementos que incorpora para garantizar la seguridad jurídica de la ciudadanía.