El pasado 23 de septiembre, la Asociación Española de Directivos de la Sostenibilidad (DIRSE) presentaba el primer Código Ético del profesional de la Sostenibilidad con la finalidad de poner a disposición de los directores de la sostenibilidad un marco ético que permita orientar el desarrollo de su labor desde la integridad, responsabilidad y rigor ético, así como promover las mejores prácticas profesionales.
Entre los representantes de las organizaciones invitadas a dicha presentación, por haber formado parte en su gestación, se contó con José Antonio Galdón, vicepresidente de Unión Profesional y presidente el Consejo General de Colegios de la Ingeniería Técnica Industrial. También asistieron representantes de Pacto Mundial de la ONU España, Fundación Étnor, Fundación SERES, Forética y Women Action Sustainability (WAS). Galdón felicitó la iniciativa por lo que supone enriquecer al resto de las profesiones. Indicaba en este sentido que «los directivos y profesionales de la sostenibilidad tienen un amplio campo de actuación e influencia para poder cambiar su entorno, por lo que, cuando estas profesiones se autoimponen un código exigente que refuerza su motivación, es una muy buena noticia para la sociedad y un ejemplo para muchos profesionales».
Ana María López de San Román, vicepresidenta de DIRSE y directora de Ética, Sostenibilidad y Alianzas en ILUNION, apuntaba asimismo durante la presentación que el Código «es una brújula ética que ayudará a los profesionales de la sostenibilidad a orientar sus actuaciones y decisiones, especialmente en un contexto donde nuestras acciones impactan directamente en la sociedad y el planeta».
Durante la mesa de debate se tuvo oportunidad de abordar diversas cuestiones, entre las que se indicaron el papel del Código en la relación con proveedores y la cadena de valor, la importancia de reforzar la confianza con los grupos de interés, la formación ética de los profesionales de sostenibilidad y cómo el liderazgo ético puede acelerar la transformación sostenible en las compañías. En cuanto a la formación, José Antonio Galdón apuntó que un profesional no formado puede resultar un riesgo para las actuaciones profesionales, siendo la formación continua fundamental porque el entorno va cambiando y las profesiones están para satisfacer las necesidades en evolución de la sociedad. Indicaba el vicepresidente de Unión Profesional que «una profesión tiene que evolucionar con la sociedad y ayudar a la sociedad a progresar, y ha de ser permeable y recíproco». Mencionó el vicepresidente de Unión Profesional la labor de actualización de los códigos deontológicos de las profesiones colegiadas en materia de medioambiente y los avances en la perspectiva ética en la transformación digital e IA. En este sentido, aunó la necesidad de que los profesionales se mantengan permanentemente actualizados a través de una adecuada formación, que dé respuesta a las necesidades sociales, pero también, en coherencia con los valores de profesionales excelentes técnicamente y, singularmente «más responsables y sensibles a lo que la sociedad está demandando».
ELABORACIÓN Y CONTENIDO
Para la elaboración del mismo, y a fin de que el código recogiese las necesidades del sector, DIRSE consultó tanto a profesionales como a entidades de referencia en materia de sostenibilidad y ética. Se realizó mediante cuestionarios y focus groups, recopilando opiniones y experiencias sobre los valores y principios más relevantes en la práctica profesional. A lo largo de estas fases, se contó con la participación de Unión Profesional, Pacto Mundial de la ONU España, Fundación Étnor, Fundación SERES, Forética y Women Action Sustainability (WAS) para guiar a los profesionales en la toma de decisiones frente a dilemas ASG (ambientales, sociales y de gobernanza), reforzando la credibilidad y la confianza de las empresas ante sus grupos de interés.
Comienza el Código Ético de la Sostenibilidad con las siguientes palabras: «Ejercer como profesional de la sostenibilidad supone un compromiso ético con el bienestar de las personas, con la mejora de las organizaciones y con el cuidado del planeta. El profesional de la sostenibilidad debe ser un modelo de coherencia liderando con el ejemplo, integrando la ética en la toma de decisiones y promoviendo cambios significativos en su entorno», y este marco, da paso a varios bloques que lo van estructurando. Destaca en primer lugar, los principios éticos fundamentales que establecen el modelo de conducta deseable de los directivos de la sostenibilidad. Se listan y describen: la integridad y transparencia; el compromiso social y ambiental; la responsabilidad y coherencia; el respeto a la dignidad y los derechos humanos; la visión integral y estratégica; la ética; el buen gobierno; el fomento de la innovación y uso responsable de la tecnología; el coraje ético; la empatía y escucha activa, así como la excelencia profesional.
Recoge también el Código un conjunto de compromisos profesionales que debieran proyectarse en el comportamiento dentro del ejercicio profesional. Si bien el código de conducta no contempla un régimen disciplinario, si que orienta acerca de las conductas que podrían considerarse como contrarias a la ética de cualquier profesional de la sostenibilidad. Finalmente, reconoce los principales mecanismos para la adhesión a dicha publicación, su seguimiento e impacto, así como el proceso a seguir para la revisión del contenido de carácter bianual para garantizar la vigencia y adecuación a los cambios normativos, tecnológicos y sociales.