Celebrada la III edición de Inicio Profesional dedicada al Emprendimiento.
Las profesiones apuestan por el emprendimiento. Esta es la motivación clave por la cual Unión Profesional ha publicado recientemente su estudio ‘Emprendimiento y profesiones liberales’, un estudio que aboga por responder cuestiones como ¿Qué hacen las profesiones liberales y qué más pueden hacer por el emprendimiento?. En esta línea se enmarca en la tercera edición del programa Inicio Profesional.
Del 8 al 10 de julio, Unión Profesional ha organizado en Madrid un curso presencial y gratuito, donde los participantes han experimentado la oportunidad de poner a prueba su futuro proyecto de emprendimiento. Fue presentado por Gonzalo Múzquiz, secretario técnico de Unión Profesional, Dolores Martín (Departamento de Estudios), y Elisa G. McCausland (Departamento de Comunicación), quienes expusieron el sentido del programa y advirtieron del aspecto de investigación que supone para Unión Profesional tanto el progama Inicio Profesional como el Emprendimiento en su proyección en los trabajos que se están llevando a cabo en la Comisión Europea.
El propósito último de Unión Profesional con este programa es que sea tomado como modelo de referencia para las organizaciones colegiales, y que se replique en sus instituciones territoriales con el propósito de contribuir desde las profesiones a la cultura emprendedora.
Sesión primera: Concretando la idea
La primera sesión fue dirigida por Tomás Andreu, fundador y director de Atípics, en forma de taller experiencial, cuyo objetivo fue el de aterrizar las ideas que los participantes trajeron ya trabajadas a la sesión, y que a su vez supuso el pretexto para introducirles en una dinámica grupal que definió el ambiente del resto de sesiones. Invitados a expresar sus aspiraciones para los tres días de curso, citaron desde la necesidad de un reconocimiento profesional de lo social, la importancia de la experimentación y la co-creación en entornos laborales, así como de la búsqueda de la complementariedad en la formulación de equipos de trabajo. Tomás Andreu, por su parte, reveló las líneas esenciales de una guía elaborada desde la experiencia personal, prólogo a la que el grupo trabajaría en dinámica después –bautizada por el ponente como la lonely planet del emprendedor–. Insistió en que “compartir una idea es reforzarla, pues se somete a un constante contraste con la realidad”. A ello hay que añadirle planificación –por medio de pequeñas acciones continuadas–, y simplificación –de la estructura, de la idea, del proyecto–. Pero, sobre todo, “tener en cuenta que, más importante que los resultados, son las personas”.
Cerró este primer día de trabajo Javier Lorén, vicesecretario general de Unión Profesional y presidente del Consejo de lngenieros Técnicos Agrícolas, señalando la importancia del intraemprendimiento. En su intervención, apuntó al potencial de las entidades colegiales como organizaciones en las que desarrollar dinámicas que propicien la generación de ideas que se traduzcan en un ambiente de autorregulación.
Sesión segunda: Plan de negocio y estrategia 2.0
La segunda sesión tuvo lugar en la sede del Consejo de Economistas de España. Introducida por su secretaria general y coordinadora del RASI, Sara Argüello, que incidió en la importancia de creación de modelos como el planteado por Unión Profesional para hacer llegar la cultura del emprendimiento a los colegios profesionales, y por ende a los profesionales, el segundo día de Inicio Profesional se centró en el desarrollo del Plan de Negocio. El día anterior, Tomás Andreu había dado ciertas nociones de modelos de planes de negocio, como el muy popular modelo Canvas, que fueron desarrollados en esta jornada por Eugenio Sánchez Gallego, responsable del Departamento de Economía de Unión Profesional. Pero, ¿qué es un plan de negocio? “Es nuestra hoja de ruta. Un plan que ha de ser vivo, dinámico, mediado por la propia experiencia. El día a día es el que nos va a decir si tenemos que modificar los diferentes elementos con los que vamos a contar”. Eugenio Sánchez proporcionó a los alumnos un borrador de ficha para llevar a cabo un proceso tangible, un taller enriquecido por las preguntas y reflexiones de los participantes.
Una filosofía del pragmatismo, la de la planificación, que Carlos Mendiola, experto en márketing 2.0, desarrolló en el ámbito de la identidad digital. Entender que Internet es una fuente de recursos es clave: la red es un ámbito en el que se han de desarrollar estrategias para atraer, capturar y retener clientes. Para que esto pueda llegar a ser una realidad es necesario, según Mendiola, planificar todo aquello que hagamos –análisis, objetivos, selección de estrategia, plan táctico de acción, presupuestos, ejecución y control–.
Tres son los ejes a tener en cuenta en el ámbito 2.0: el desarrollo de la capacidad de influencia (alcance), lograr capitalizar esa influencia y traducirla a objetivos de marketing (conversión), e invertir en el desarrollo de las relaciones establecidas en la virtualidad para estimular visitas y, por ende, oportunidades de negocio (retención). O lo que también podría plantearse de la siguiente manera: hay que trabajar desde lo humano —inbound— y proponer una experiencia de cambio; satisfacer una necesidad con una solución. Para ello no hay que olvidar el arte de contar.
Sesión tercera: Mercado laboral y un ejemplo práctico
La tercera sesión estuvo introducida por Mari Cruz Vergillos, coordinadora del Consejo del Trabajo Social, que dio la bienvenida en su sede haciendo un apunte sobre el momento presente, contexto importante para llevar a cabo proyectos desde las diversas profesiones que componen Unión Profesional. Enfocó, como también hizo Manuel G. Pascual, responsable de las iniciativas de Emprendimiento del Consejo de Trabajo Social, en la necesidad de trasladar el compromiso social de las profesiones a la cultura del emprendimiento.
En este sentido, Jorge Guelbenzu, director de Infoempleo y Avanzaentucarrera, acompañó con datos recién publicados en su XVIII Informe sobre Empleo (realizado por Infoempleo y Adecco), su diagnóstico del escenario presente; un escenario donde aumentan los trabajos por proyectos, y el emprendimiento, el freelancismo o el autoempleo crece. Incidió Guelbenzu en un cierto cambio cultural, pues ya se puede ir hablando de programas por proyectos, por ejemplo. También subrayó necesidades futuras del mercado que se concretarán, sobre todo, en el ámbito de la economía digital.
El cierre de la jornada lo puso Alejandro Olleta, emprendedor social responsable de Social 21, que trabajó con los emprendedores a través de dinámicas. Olleta recuperó para la clausura de esta jornada la importancia de ser consciente del otro, de sus emociones. Para ello, analizó con una herramienta de trabajo en grupo, el Animómetro, el nivel de implicación de los participantes, devolviendo el foco a la importancia para el desarrollo productivo de una idea de las emociones.
>> Nota: En los enlaces podréis encontrar las entrevistas realizadas en Canal Profesiones a cada uno de los ponentes de Inicio Profesional: Emprendimiento.