El 19 de febrero, la sede del Club Abierto de Editores (CLABE), situada en el edificio de la CEOE (Confederación Española de Organizaciones Empresariales), acogía un encuentro de las publicaciones profesionales, editadas por los Consejos Generales y Colegios de ámbito nacional aunadas en Unión Profesional.
Tras la bienvenida compartida del presidente de CLABE, Arsenio Escolar y del presidente de Unión Profesional, el Dr. Tomás Cobo, las y los directores, coordinadores y redactores de dichas publicaciones tuvieron la oportunidad de poner en común las principales preocupaciones y desafíos de un sector especializado cuyo principal valor es la información veraz y segura que transmiten.
Las publicaciones de las corporaciones colegiales, miembros de Unión Profesional, tienen una tradición, en muchas ocasiones, obviada por sus profesionales, así como por la propia sociedad. La evolución de sus perspectivas y tratamiento nos hablan de los tiempos en los que estas se han ido desarrollando. Hablamos de publicaciones históricas, con más de cincuenta años de vida, y otras no tan longevas, pero que han llegado a sobrepasar los 200 números, como ha sido el caso de esta misma cabecera.
DEONTOLOGÍA COMO GARANTÍA
Durante su intervención, el Dr. Tomás Cobo subrayó el compromiso que «como profesiones tenemos con la sociedad, quien nos otorga su confianza ilimitada», por lo que advirtió de la necesidad de evitar la desinformación, «así como la publicidad engañosa». Para ello, aconsejó a los medios reunidos en este encuentro, contrastar sus informaciones con las corporaciones colegiales, aglutinadores del conocimiento profesional, experto y técnico. «A todas ellas, nos une el respeto al código deontológico, que da razón de ser a nuestra profesión y es garantía plena para la ciudadanía de un servicio profesional libre de riesgos».
Por su parte, Arsenio Escolar, presentó ante las publicaciones profesionales que acudieron a la cita la labor de CLABE, a favor de una información periodística y en defensa del sector editorial de las publicaciones periódicas, poniendo en valor la fuerza de la alianza ante posibles normativas discriminatorias con este tipo de publicaciones. «Dar a conocer la existencia de nuestro sector es el primer paso para que tanto las Administraciones Públicas como la sociedad valore la información especializada y profesional», puesto que como ciudadanos «no siempre estamos lo suficientemente activos ni informados».
Tras una primera ronda en la que las y los responsables de las publicaciones profesionales pudieron presentar su labor en su Consejo General y en el Colegio Profesional de ámbito nacional, Juan Zafra, director general de CLABE, dinamizó la sesión en la que se reflexionó sobre las inquietudes editoriales en el subsector de las profesiones colegiadas. Asimismo, durante esta primera reunión entre CLABE y Unión Profesional, se insistió en la ausente preocupación por el tema deontológico en los medios de comunicación, pieza clave para alejar de la ciudadanía la desinformación y los bulos.
CULTURA PROFESIONAL EN TIEMPOS DE CAMBIO TECNOLÓGICO
El conocimiento profesional que emana de las corporaciones colegiales se enmarca en el contexto de la Cultura Profesional, esto es, el conjunto de saberes cualificados, especializados y complejos que dan cuenta del progreso humanista, científico, industrial y tecnológico que impulsan en la actualidad profesiones como las agrupadas en Unión Profesional. Los Consejos Generales y Colegios Profesionales tienen el deber de proteger, ordenar y visibilizar el acervo cultural que emana de sus estructuras y dinámicas; somos los primeros responsables de su puesta en valor interna y proyección externa.
En tiempos de ChapGPT e Inteligencia Artificial (IA), la idea de Cultura Profesional se expone como una estrategia de comunicación común, con el propósito de preservar el patrimonio material e inmaterial que supone, entre otras cuestiones, la presencia de las publicaciones profesionales en nuestra sociedad.
