Este 8 de marzo de 2024, Día Internacional de las Mujeres, Unión Profesional se suma a la campaña de Naciones Unidas en su compromiso con la cultura profesional de la igualdad celebrando la presente edición bajo el lema “Invertir en las mujeres, acelerar el progreso”.
Tal y como señala la campaña de ONU Mujeres, «el mundo se enfrenta a numerosas crisis, desde conflictos geopolíticos hasta niveles de pobreza en aumento, pasando por el impacto cada vez mayor del cambio climático, y estos retos solo pueden abordarse con soluciones que empoderen a las mujeres: A partir de la inversión que impulse el cambio y acelerando la transición hacia un mundo más sano, seguro e igualitario para todas y todos».
En el marco europeo, la acción legislativa para la Igualdad de Género 2020-2025 se mantiene, con especial foco en la prevención y actuación contra la violencia de género tras la ratificación del Convenio de Estambul por parte de la Unión Europea, en coherencia con los debates sobre la Directiva sobre la lucha contra la violencia contra las mujeres, que próximamente verá la luz.
La inversión en mujeres es estratégica para alcanzar la igualdad real y efectiva, así como la introducción de la perspectiva de género en las políticas presupuestarias. Si se mantienen las tendencias actuales, más de 342 millones de mujeres y niñas podrían vivir en pobreza extrema en 2030, advierten desde ONU Mujeres. Es por ello que, para garantizar que se tengan en cuenta las necesidades y prioridades de las mujeres, los Gobiernos han de priorizar la financiación con perspectiva de género y aumentar el gasto público en servicios esenciales y protección social.
Entender el progreso en términos de justicia social es necesario. Así lo destaca Victoria Ortega, presidenta de Unión Profesional vicepresidenta del Consejo Europeo de las Profesiones Liberales, por el Día Internacional de las Mujeres 2024: «Las mujeres somos la mitad de la población, y merecemos visibilidad y respeto, igual retribución y cuidado, así como estar representadas de manera proporcional en la esfera pública y en los puestos de responsabilidad. Las profesiones, unidas, continuaremos trabajando para transformar todos estos retos en realidades».
ESTUDIO UP SOBRE LAS BRECHAS SALARIAL Y LABORAL ENTRE LOS Y LAS PROFESIONALES
Unión Profesional publica la undécima edición de su Estudio UP: sobre las brechas salariales y laborales entre hombres y mujeres en las profesiones. Un análisis llevado a cabo desde el año 2014 que examina el desempeño de los y las profesionales con objeto de identificar los avances y retrocesos en materia de brecha económica y condiciones laborales en el ejercicio profesional.
Entre las principales conclusiones de esta nueva edición del estudio se encuentran:
▪ BRECHA SALARIAL: La brecha salarial en el subsector de servicios profesionales se incrementó una décima hasta el 14,49% en el 2021. Esta subida supone el segundo año de leve repunte que contrasta con la tendencia de moderación que se produjo antes de la pandemia de COVID-19. A su vez, la brecha en la dirección creció casi un punto y medio porcentual hasta el 19,22%, el dato más elevado desde el 2019. En ambos casos, este comportamiento trajo causa en un aumento salarial general medio ligeramente más elevado en los hombres en relación a sus compañeras.
En comparación, todo el mercado laboral redujo su brecha cuatro décimas hasta el 18,36%. Otras fuentes generales para el 2022 (año más reciente disponible) como la Agencia Tributaria reflejan que la brecha salarial subió dos centésimas hasta el 19,89%.
Algo más favorable fue la Encuesta de Población Activa con una moderación hasta el 15,70% en términos de salario bruto mensual. Las razones principales que sugiere la evidencia para explicar esta brecha se encuentran en dos factores esenciales: los complementos salariales referidos a la formación, antigüedad, trabajos en días festivos, pluses de nocturnidad o peligrosidad que, habitualmente, son mayores en los hombres.
Y, por otro lado, en las condiciones laborales se observa que las mujeres tienen mayor presencia en la jornada parcial, en contratación temporal inferior a un año y en rotación laboral y estacionalidad. Con todo, sería recomendable que la publicación de datos oficiales fuera más desagregada y precisa para analizar los diferentes elementos que afectan a la brecha salarial.
▪ CONDICIONES LABORALES: Durante el año 2023 se apreciaron algunos resultados mixtos para las profesionales en las condiciones laborales analizadas. En relación con sus compañeros la brecha se moderó en la contratación temporal inferior a un año, repuntó tenuemente en la ocupación a jornada parcial y se amplió ligeramente en parte de las secciones de profesiones en rotación de empleo y estacionalidad.
Aún así, el conjunto del mercado laboral y, específicamente, el grueso de personas ocupadas en el subsector de servicios profesionales, experimentaron mejoras generalizadas en estas condiciones de trabajo. En esta moderación hay que considerar los efectos favorables de la Reforma laboral del 2022. Si bien, sería necesario analizar otros efectos como el incremento del volumen de fijos discontinuos desde mediados del 2022 y las tasas de no superación de los periodos de prueba.
Además, las mujeres acusan porcentajes más altos que sus homólogos en las condiciones laborales descritas como en los últimos años. Escenario que contribuye a mantener parte de la brecha salarial, y que puede tener impacto a medio y largo plazo en la continuidad y estabilidad de las carreras profesionales. Más en concreto, la mayor presencia de mujeres profesionales en la ocupación a jornada parcial y en la rotación y estacionalidad del empleo habría de conjugarse con otros factores de análisis que podrían explicar una menor demanda de empleo de estas para orientar más tiempo a otros asuntos como los cuidados de su entorno.
▪ OCUPACIÓN Y PARO: El año 2023 finalizó con un aumento medio anual de la ocupación del 4,15% de las profesionales, frente al 10,66% más de sus compañeros. Este balance dio lugar a que el porcentaje medio de ocupación de las mujeres en el subsector de servicios profesionales se suavizara algo más de un punto porcentual hasta el 65,61%, el más bajo desde el 2013. Si bien, prácticamente, dos de cada tres personas ocupadas en el subsector de servicios profesionales son mujeres. Al mismo tiempo, las mujeres de 25 años o más solo representan el 34,7% de los puestos directivos en el mercado laboral en el 2022, aunque con una senda sostenida de mejora desde el 2011.
Por su parte, todo el subsector de servicios profesionales anotó una subida anual de horas efectivas semanales trabajadas del 5,76% en el 2023. Si comparamos el periodo entre 2023 y el 2019 las horas trabajadas en conjunto crecieron un 18,61% en el caso de los hombres por un 12,30% de sus compañeras, lo que refiere un incremento y recuperación algo desigual pero sólida tras la pandemia.
La tasa de paro en las profesiones entre hombres y mujeres quedó de nuevo por debajo del 5% en el 2023. Esto es, una situación más coherente con el desempleo friccional o cercana al pleno empleo. En 9 de las 14 divisiones pertenecientes o relacionadas con el subsector de servicios profesionales la tasa de paro fue mayor en las mujeres, sin cambios frente al 2022.
Las mujeres con educación superior representan el grupo mayoritario de la ocupación media en el mercado laboral con un 24,52% del total, una décima más que en el 2022, y dos puntos y medio más que sus homólogos. Es decir, una de cada cuatro personas ocupadas en España es una mujer con estudios superiores. Con todo, la sobre cualificación sigue afectando más a las mujeres y en España según CEDEFOP y Eurostat.
A su vez, las mujeres con educación superior agregan el 24,25% de las personas que manifiestan estar en una situación de subempleo1 dentro del mercado laboral en el cuarto trimestre del 2023. Un punto y medio más respecto al mismo periodo del 2022, y prácticamente el doble que sus compañeros en la misma tesitura de subempleo.
▪ Descargar en pdf el Estudio UP sobre las Brechas Salariales y Laborales 2024