Serafín Romero, presidente del Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos, aborda en el siguiente artículo la situación de la profesión ante la crisis del COVID-19.
A finales del mes de febrero, siguiendo las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS), el Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos (CGCOM) desaconsejó la celebración de reuniones o congresos nacionales e internacionales de médicos, ante la posibilidad de que el sector se viese afectado por la pandemia del COVID-19 en vísperas de lo que se sospechaba podía ser una gran crisis de salud. Esa recomendación fue muy criticada. Lamentablemente, la realidad nos ha dado la razón puesto que las semanas siguientes afrontamos una situación que nos ha desbordado a todos: gestores políticos, profesionales sanitarios y sociedad en general, que nunca se habían enfrentado a algo parecido.
Hay 44.000 sanitarios contagiados, en torno al 20% del volumen de contagio de la población general; y ya son, muy a nuestro pesar, más de cuarenta los profesionales de la medicina fallecidos en “acto de servicio”.
Desde el primer momento, el CGCOM tuvo claro la necesidad de trabajar con seguridad y protección para evitar el contagio de los profesionales, de los compañeros de trabajo y de sus propias familias. Por ello, hemos insistido en redes sociales a través del hashtag #NiUnDíaMás en que sin las necesarias medidas de protección para los equipos asistenciales la situación sería dramática. Hoy por hoy resulta inasumible seguir asistiendo a un incremento de los casos de infección. Hay 44.000 sanitarios contagiados, en torno al 20% del volumen de contagio de la población general; y ya son, muy a nuestro pesar, más de cuarenta los profesionales de la medicina fallecidos en “acto de servicio”.
Hemos insistido también en la necesidad de realizar pruebas diagnósticas que nos faciliten los mecanismos de aislamiento y cuarentena obligados para poder contrarrestar los efectos devastadores de esta pandemia. Bajo la campaña #NiUnTestdeMenos hemos reiterado la importancia de realizar todos los test de diagnóstico de coronavirus que sean necesarios. Saber cuántos casos reales había y dónde se encontraban era esencial para abordar esta pandemia con las decisiones más adecuadas, para detener su escalada y evitar nuevos contagios.
Todos debemos caminar en la misma dirección para afrontar las secuelas sanitarias, económicas y sociales que ha provocado. Las profesiones sanitarias, que formamos parte de esta gran familia que es Unión Profesional, estamos unidas y esperamos que nuestros gestores sepan estar a la altura de esta situación.
Desde la lealtad a la Administración sanitaria, la profesión médica ha estado al lado de los profesionales, de los pacientes y de la sociedad en general, que nos ha reconfortado con ese aplauso diario que han dedicado a todos los que están en primera línea de trabajo. Pero tenemos que seguir afrontando un porvenir incierto, una vuelta a la “nueva normalidad” en la que todos debemos colaborar.
El CGCOM ha puesto en marcha una Comisión Asesora COVID-19-OMC en la que participan más de 20 expertos de diversas áreas para analizar y realizar propuestas relativas a las múltiples dimensiones epidemiológicas, de salud pública, clínicas, profesionales, bioéticas y de organización asistencial que plantea esta pandemia.
Todos debemos caminar en la misma dirección para afrontar las secuelas sanitarias, económicas y sociales que ha provocado. Las profesiones sanitarias, que formamos parte de esta gran familia que es Unión Profesional, estamos unidas y esperamos que nuestros gestores sepan estar a la altura de esta situación.